LA GENTE ES MUY EXAGERADA
Tengo los pantalones mojados, gotean de las rodillas para abajo. La señora que está sentada al lado, en el cincuenta y tres, trata de alejarse lo máximo posible de mí.
Serie: Mérida, ciudad Perdida (1990–1993)
Una nueva serie que explora los límites entre la realidad y la ficción a través de la perspectiva de un personaje complejo.
Escribe borracho, edita sobrio— Ernest Hemingway
Serie: Mérida, ciudad Perdida (1990–1993)
Una nueva serie que explora los límites entre la realidad y la ficción a través de la perspectiva de un personaje complejo.
Escribe borracho, edita sobrio— Ernest Hemingway
Tengo los pantalones mojados, gotean de las rodillas para abajo. La señora que está sentada al lado, en el cincuenta y tres, trata de alejarse lo máximo posible de mí.
Hace trescientos años, un grupo de poetas, astrofísicos y curanderos cumaneses se congregaron en las faldas del cerro Quetepe para fundar la Oficina de Correcciones Divinas.
–Taxi, caballero; -¿Cuánto me cobra hasta el tercer piso, maestro?
El viejo llevaba años empeñado en fruncir el ceño como si ese gesto fuera su última herencia.
Nadie nota mi olor. Son vomitados por el ascensor y se mueven como ratoncitos por los pasillos hasta llegar a sus escritorios.